PASANDO CALOR
En una calle de Barcelona van dos personas, cada una con sus bastones de ayuda, pues ambas eran ciegas, pero lo mas tremendo es que ambas hiban empapadas de sudor por la calor que estaba haciendo, una de ellas exclama y dice, ha ojala lloviera, y la otra hechando a reir le contesta, ojala yo tambien.