Siguiendo una de mis recomendaciones voy a escribir acerca de lo que he estado pensando en estos días, y es acerca del hecho de romper esquemas y patrones.

Los esquemas, son como los paradigmas, son como patrones que nos ayudan a comprender la realidad, cuando somos niños casi completamente inconscientes, miramos la realidad sin filtros, pero luego nos van enseñando: Mira ese animalito, es un perrito, aquello es una hoja, y un árbol… las luces en el cielo, son estrellas, luego son planetas… Ese es un ruido o un sonido… aquello es bello o es feo, especial o corriente.

Los esquemas son muy útiles, nos ayudan también a comprendernos unos a otros, pero también causan rechazo cuando entre nosotros son diferentes. Las formas de pensar se desarrollan, pueden evolucionar, mutar, ser flexibles, o también pueden aferrarse a los esquemas, que pueden ser las “doctrinas”, por no ahondar demasiado.

¿Cuándo se convierten en un problema los esquemas? Cuando nos aferramos.

Es muy bueno tener métodos para hacer las cosas, la automatización brinda rapidez y eficacia, ahorro del tiempo, energía y de: la necesidad de tener que pensar…

“Ser o no ser, he allí el dilema”, como decía Shakespeare, porque lo que nos hace “Ser” es precisamente: Pensar. Creo que Shakespeare se inspiró en Descartes, con su Cogito Ergo Sum: “Pienso, luego existo”.

Los esquemas son buenos mientras no nos adormezcan, mientras seamos capaces de observarlos, revisarlos, adaptarlos, e incluso cambiarlos.

Me inquieta cuando veo a muchas personas siguiendo algo con lo cual no se sienten identificados, y me doy cuenta que no se sienten identificados, porque no son totalmente conscientes de lo que hacen, no se dan cuenta de los errores pequeños ni grandes, porque están adormecidos. Cuando uno se identifica con lo que hace permanece despierto, sintiendo que es quien maneja el esquema, y no el esquema a uno.

Romper esquemas, ¿Es difícil? Yo creo que no es tan difícil como parece, si se empieza desde lo más pequeño. Hacer pequeños cambios cada día, usar una ruta diferente, ensayar escuchar en lugar de hablar, o hablar si eres de los que permanece callado, dormirse más tarde, levantarse más temprano que de costumbre… Tomar un baño de agua fría.

Mirar con curiosidad sincera, notar lo diferente, notar lo coincidente, detallar, observar.

Creo que uno de los mayores problemas de la sociedad actual es su capacidad para adormecernos, el hecho de dejar de usar nuestros sentidos, y dejar de darnos cuenta.

Pensar, es uno de los mayores actos de libertad que existen, y aunque el cerebro se resista, Descartes no se equivocaba cuando decía que pensar estaba relacionado a lo que Somos, es lo que nos hace: “SER”.

“No te llenes de calma, no reserves del mundo solo un rincón tranquilo, no dejes caer los parpados pesados como juicios…” decía el poeta… (Benedetti)

Les invito a pensar, a cuestionar, a comprender, a protestar si es necesario y por supuesto y muy valioso: les invito a crear, contribuir, aportar… todos tenemos algo que dar.

Muchas gracias por leer y comentar.

_{Las fotos son de mi autoría, editadas en Canva.}

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